El cuerpo sin vida de Raquel, la mujer desaparecida en Villalbilla, fue hallado por agentes de la Guardia Civil en un zulo dentro de su vivienda y no presentaba signos evidentes de violencia. Se espera ahora el resultado del análisis toxicológico. El caso está siendo investigado como un posible crimen de violencia de género, y se ha confirmado que la mujer no figuraba en el sistema Viogén.
La Guardia Civil encontró el cuerpo en una vivienda de Villalbilla, y arrestó a su esposo, quien había denunciado su desaparición el 3 de septiembre. El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Alcalá de Henares se encarga ahora del caso.
Mientras tanto, el Ministerio de Igualdad está recopilando información sobre este posible caso de violencia de género. Si se confirma, Raquel sería la cuarta víctima en Madrid en 2024, elevando el total de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas a 35 en lo que va del año y a 1.279 desde que se iniciaron los registros en 2003. No se habían presentado denuncias previas por violencia de género contra Raquel, quien no estaba registrada en el sistema Viogén.
La desaparición de Raquel, de 54 años, fue reportada anteriormente, el 31 de agosto, por la Asociación SOS Desaparecidos y el Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES), que depende del Ministerio del Interior.
Hallado el cadáver de la mujer desaparecida el 31 de agosto en Villalbilla
Contradicciones del marido que denunció la desaparición
Según la denuncia presentada por el marido en el cuartel de la Guardia Civil, la última vez que se vio a la víctima fue el 31 de agosto, cuando se dirigió a Griñón, a unos 75 kilómetros de Villalbilla, para visitar a su madre, pero nunca regresó. Sin embargo, los agentes encontraron ciertas inconsistencias en su relato; además, varios medios informaron que el hombre simpatizaba con el movimiento Hare Krishna.
Durante la investigación, la Guardia Civil descubrió que Raquel nunca llegó a ver a su madre y que, días después de su desaparición, se realizaron varias llamadas desde su teléfono móvil. Por esta razón, los agentes solicitaron al esposo entrar en la vivienda que ambos compartían, ubicada en la avenida del Romero. Ante la negativa del hombre, la Guardia Civil ingresó a la casa el domingo con una orden judicial.
En el interior de la vivienda, encontraron a la mujer desaparecida en una habitación cerrada e insonorizada que se asemejaba a un pequeño escondite. El cuerpo estaba sobre la cama, sin signos visibles de violencia, pero con espuma en la boca y varios blísteres de pastillas cerca, según informó el grupo Prensa Ibérica. Fuentes cercanas a la investigación revelaron que la mujer había intentado suicidarse en dos ocasiones antes de su desaparición.
Al ver a los agentes en la vivienda, el marido intentó escapar, siendo detenido este martes. Tras su arresto, fue puesto a disposición de la autoridad judicial, según indicaron fuentes de la Delegación del Gobierno en Madrid.
La investigación apunta hacia un posible crimen machista
El informe preliminar de la autopsia ha indicado que el cuerpo no muestra signos de violencia, según fuentes cercanas a la investigación citadas por EFE, aunque los investigadores esperan los resultados del análisis toxicológico.
El delegado del Gobierno en Madrid, Fran Martín Aguirre, declaró este miércoles en RNE que «la investigación sugiere que la causa más probable de la muerte fue la ingesta de medicamentos».
También mencionó que la víctima no estaba registrada en el Sistema VioGén y que existe una «posibilidad» de que el detenido esté involucrado en el caso, aunque se está a la espera de la decisión de la jueza.
Con la investigación en curso para esclarecer las circunstancias del fallecimiento, la Guardia Civil está examinando otras evidencias, como el teléfono móvil de la víctima, para determinar si el detenido pudo haber tenido algún papel en la muerte.