El pleno extraordinario celebrado el pasado 28 de octubre en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha desatado una fuerte controversia en torno a la aprobación de la nueva tasa europea de recogida de residuos. La medida, impulsada por el gobierno local conformado por PP y VOX, ha sido objeto de duras críticas por parte de la formación política Podemos Alcalá, que denuncia la falta de proporcionalidad, transparencia y justicia social en su aplicación.
La tasa, que se enmarca en la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular, responde a la transposición de una directiva europea aprobada en 2018. Esta normativa establece que el coste total del servicio de recogida, transporte y tratamiento de residuos debe ser asumido por las vecinas y vecinos de cada municipio antes de 2025. Sin embargo, Podemos Alcalá acusa al gobierno local de manipular la normativa para perjudicar a la mayoría social.
Entre las principales críticas se encuentra el carácter fijo de la cuota, establecida en 74 euros anuales para todas las viviendas, independientemente de su tamaño, valor catastral o número de ocupantes. Esta medida, aseguran, contrasta con las políticas adoptadas por otros municipios como Móstoles, Getafe o Alcorcón, que han optado por aplicar criterios más equitativos y progresivos.
“¿Cómo se puede confiar en esta Junta de Gobierno cuando su sentido de la justicia es seguir ahogando a la clase trabajadora?”, cuestionan desde Podemos Alcalá. En su comunicado, califican la medida como un golpe a las economías más vulnerables y critican que no se haya publicado una memoria económica que detalle el destino de los fondos recaudados.
Además, la formación morada exige que esta tasa se gestione de forma 100% pública, con criterios transparentes y progresivos que tengan en cuenta factores como los ingresos familiares, el valor catastral o la superficie de las viviendas. También exigen que los recursos hasta ahora destinados a la recogida de residuos se redirijan a cubrir necesidades sociales urgentes en la ciudad.
La presidenta de la FMM y alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet, califica la nueva tasa de residuos como un «quebradero de cabeza»
Por su parte, el Ayuntamiento, presidido por Judith Piquet, defiende que la medida cumple con las exigencias europeas y busca garantizar la sostenibilidad del servicio de recogida de residuos. Sin embargo, esta explicación no convence a sectores de la oposición, que interpretan la nueva tasa como una estrategia para tapar los agujeros generados por la “mala gestión municipal”.
El debate sobre esta tasa refleja una creciente preocupación ciudadana por el impacto económico que tendrá en los hogares alcalaínos y abre un nuevo frente de críticas hacia el gobierno local. Mientras tanto, las vecinas y vecinos de Alcalá de Henares esperan respuestas claras sobre el futuro de los servicios públicos en la ciudad.